Nuestra empresa se encuentra adoptando regulaciones que promueve la implementación de controles preventivos en el proceso de alimentos. Esta actualización nos impulsa a ajustar nuestros planes bajo el esquema de “controles preventivos” para asegurar la seguridad de los productos destinados al consumo humano.
Los controles preventivos son medidas, prácticas y procesos que, basados en el conocimiento científico actual, minimizan o previenen los riesgos identificados en la fabricación, transformación, envasado o conservación de alimentos. Es fundamental contar con personal cualificado y actualizar el análisis para determinar los controles preventivos necesarios.
Previo al análisis, es importante implementar las buenas prácticas de manufactura (BPM), que incluyen el control de higiene personal, la limpieza, los controles de proceso y almacenamiento, así como el control de agua y plagas, entre otros requisitos. Estas prácticas son la base de todo sistema de inocuidad alimentaria.
El proceso de identificación de peligros y controles preventivos consta de cinco pasos:
- Listar los pasos del proceso e ingredientes.
- Identificar los peligros conocidos o razonablemente esperados.
- Determinar si los peligros requieren controles preventivos.
- Identificar los controles preventivos para los peligros significativos.
- Aplicar los controles preventivos necesarios para normalizar los procesos de fabricacion, venta o distribución de los mismos.
En resumen, estamos implementando rigurosos controles preventivos respaldados por referencias científicas y experiencias organizativas para garantizar alimentos seguros y proteger la salud del consumidor.
